¿Qué es la cervicalgia?
La cervicalgia es el dolor localizado en la parte superior de la columna vertebral, conocida como la región cervical. Este dolor puede irradiarse hacia los hombros, brazos o incluso la cabeza, provocando malestar e incapacidad para realizar tareas cotidianas. Los estudios indican que la cervicalgia es una afección común, especialmente en personas que mantienen posturas inadecuadas durante largos periodos o que sufren estrés físico o emocional. Se estima que hasta un 67% de las personas experimentarán algún episodio de dolor cervical a lo largo de su vida.
Identifica los síntomas de la cervicalgia a tiempo
Los síntomas de la cervicalgia pueden variar en intensidad y ubicación, pero los más comunes son:
- Dolor en la zona cervical que puede irradiarse hacia los hombros o la cabeza.
- Rigidez en el cuello, especialmente al intentar girarlo o moverlo.
- Dolor de cabeza (cefaleas tensionales) asociado al dolor cervical.
- Sensación de hormigueo o debilidad en los brazos, en casos más graves.
Tratamientos de fisioterapia para la cervicalgia
Terapia manual: Técnicas de movilización articular y masoterapia para reducir la tensión muscular y mejorar la movilidad de la columna cervical. Un estudio publicado en The Journal of Orthopaedic & Sports Physical Therapydestacó la efectividad de las técnicas de movilización manual en el tratamiento del dolor cervical agudo y crónico.
Ejercicio terapéutico: Diseñamos programas de ejercicios específicos para fortalecer los músculos del cuello, mejorar la postura y aliviar la tensión. Según las directrices clínicas, el ejercicio terapéutico no solo reduce el dolor, sino que también previene la recurrencia de la cervicalgia.
Punción seca: Técnica para tratar puntos gatillo miofasciales, que suelen estar presentes en casos de cervicalgia crónica. La liberación de estos puntos mejora notablemente la movilidad y reduce el dolor, como lo indica una investigación reciente sobre el uso de esta técnica en la fisioterapia.
Ejercicios terapéuticos recomendados para personas con Cervicalgia
Ejercicios supervisados que mejoran tu salud
Además del tratamiento en consulta, existen ejercicios sencillos y efectivos que puedes realizar en casa para aliviar el dolor cervical y prevenir su reaparición. A continuación, te proponemos algunos ejercicios recomendados:
Cómo hacerlo: Siéntate o permanece de pie con la espalda recta. Inclina la cabeza hacia un lado (acercando la oreja al hombro), ayudándote con una mano para un estiramiento suave. Mantén la posición durante 20-30 segundos y repite del otro lado. Beneficio: Este ejercicio estira el músculo trapecio superior, aliviando la tensión en la zona cervical.
Cómo hacerlo: Siéntate en una silla con la espalda recta. Con las dos manos detrás de la cabeza, inclina lentamente la barbilla hacia el pecho hasta que sientas un estiramiento en la parte posterior del cuello. Mantén la posición durante 20-30 segundos. Beneficio: Este ejercicio ayuda a aliviar la rigidez y el dolor en la parte posterior del cuello.
Cómo hacerlo: Acuéstate boca arriba con las rodillas flexionadas. Mantén la cabeza en contacto con el suelo y realiza una leve inclinación de la barbilla hacia el pecho, activando los músculos profundos del cuello. Mantén esta posición durante 5-10 segundos y repite 10 veces. Beneficio: Este ejercicio fortalece los músculos profundos del cuello, mejorando la estabilidad y reduciendo el riesgo de dolor cervical.
Cómo hacerlo: Colócate en una puerta con los brazos apoyados en los laterales de la misma (codos a 90 grados). Inclina tu cuerpo hacia adelante hasta que sientas un estiramiento en el pecho. Mantén la posición durante 20-30 segundos. Beneficio: Unos pectorales tensos pueden afectar la postura y agravar el dolor cervical, por lo que este estiramiento ayuda a mejorar la alineación postural.
Beneficios de la fisioterapia en la osteoporosis
Alivio del dolor
Uno de los principales objetivos de la fisioterapia es reducir el dolor en la zona cervical. Mediante técnicas de terapia manual, masajes y ejercicios específicos, se disminuye la tensión muscular y se mejora la movilidad, lo que contribuye a aliviar el dolor de forma efectiva. La fisioterapia también ayuda a reducir la inflamación en los tejidos afectados, acelerando la recuperación.
Mejora de la movilidad
La cervicalgia puede limitar los movimientos del cuello y causar rigidez. Los fisioterapeutas emplean técnicas como la movilización articular y ejercicios de estiramiento para mejorar la flexibilidad y rango de movimiento del cuello. Esto permite que el paciente recupere una mayor capacidad funcional en su vida diaria.
Fortalecimiento muscular
Los ejercicios terapéuticos que se incluyen en los planes de tratamiento ayudan a fortalecer los músculos del cuello y de la espalda. Un cuello más fuerte mejora la estabilidad de la columna cervical y disminuye la posibilidad de recurrencia del dolor. Además, los músculos fortalecidos ayudan a mantener una mejor postura, que es clave para prevenir la cervicalgia.
Prevención de la Cervicalgia
Prevención del dolor cervical
Además del tratamiento activo, la prevención es clave para evitar la aparición o reaparición del dolor cervical. Algunas medidas recomendadas son:
- Mantener una postura adecuada al estar sentado frente al ordenador o al utilizar el móvil.
- Realizar pausas activas durante el trabajo para estirar y movilizar la zona cervical.
- Fortalecer la musculatura del cuello y la espalda con ejercicios específicos.
- Evitar el estrés en la medida de lo posible, ya que el estrés emocional puede agravar las contracturas cervicales.
El tiempo de recuperación depende de varios factores, como la gravedad del dolor, el estado físico del paciente y la causa subyacente de la cervicalgia. En la mayoría de los casos, los pacientes empiezan a notar mejoras significativas tras 4-6 sesiones de fisioterapia, especialmente si siguen un programa de ejercicios en casa y corrigen su postura. En casos más crónicos, puede requerirse un tratamiento más prolongado.
No, la fisioterapia no debería ser dolorosa. Aunque algunas técnicas, como la punción seca o la movilización de tejidos profundos, pueden generar una leve incomodidad momentánea, el objetivo siempre es reducir el dolor y mejorar la función. Los fisioterapeutas ajustan el tratamiento según la tolerancia de cada paciente para garantizar una experiencia lo más cómoda posible.
Para prevenir el dolor cervical, es importante:
- Mantener una postura correcta, especialmente al estar sentado o utilizando dispositivos electrónicos.
- Realizar pausas y estiramientos si pasas mucho tiempo en una misma posición.
- Fortalecer los músculos del cuello y espalda con ejercicios específicos recomendados por tu fisioterapeuta.
- Evitar el estrés y realizar técnicas de relajación que alivien la tensión muscular.
Tu aliado en la lucha contra la Cervicalgia
Fisioterapia en Aldaia